Es uno de los ejes de su campaña. El ataque a la credibilidad de la palabra de su rival, Pedro Sánchez, a quien ha tachado de mentiroso una y otra vez. “No seré Pedro Sánchez, no”, dijo Alberto Núñez Feijóo el pasado sábado en un multitudinario mitin en Pontevedra, en el que prometió que no incurriría en las falsedades que atribuye al líder socialista, tampoco en el cara a cara que le iba a enfrentar con el presidente del Gobierno. “Estoy tranquilo. Porque voy a decir la verdad y no voy a mentir a nadie”, remarcó antes del debate. Pero en el duelo dialéctico con el candidato socialista, Feijóo también cayó en afirmaciones falsas, como tuvo que reconocer este viernes. Las llamó incorrecciones, mientras volvía a insistir en que su adversario mintió y lo hizo más que él, con falsedades que dieron para llenar “once folios” de su equipo. Feijóo confesó que le preocupa que se le acuse de mentir, porque eso significaría que cae en los mismos problemas que denuncia, pero volvió, al mismo tiempo, a reincidir en afirmaciones tergiversadas.

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