Pedro Sánchez no para de mandar señales de optimismo y de dar por amortizada la investidura de Alberto Núñez Feijóo, sin aguardar a la votación definitiva de mañana en el Congreso. El secretario general del PSOE y presidente de la Internacional Socialista atribuye el fracaso del candidato conservador, que en el último mes no ha sido capaz de ampliar los 172 votos (PP, Vox, UPN y Coalición Canaria) con los que partía cuando recibió el encargo del Rey, a la alianza con Vox que le ha llevado a ampliar su poder territorial, cogobernando en cinco comunidades autónomas (Castilla y León, Comunidad Valenciana, Extremadura, Aragón y Murcia) y 140 ayuntamientos. Un pacto que imposibilita el respaldo de otros partidos como el PNV. Incluso Coalición Canaria ha dejado claro que su respaldo a la candidatura de Feijóo “no es ideológico” y ya se ha abierto a apoyar la investidura de Sánchez. “La derrota electoral de su tentativa de retroceso se produjo el pasado 23 de julio. La consumación de su derrota parlamentaria se consumará esta semana, y lo vais a poder contemplar en directo”, ha afirmado Sánchez en la clausura de una cumbre de los socialdemócratas europeos en Madrid.

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